La Comisión de Economías Regionales de Cooperar debatió durante dos días aportes al anteproyecto de Ley de Economía Solidaria. “Hay que pensar nuevos modelos que permitan dar cuenta del doble carácter del agricultor familiar, que es tanto productor como trabajador”, fue una de las conclusiones de las diversas organizaciones productoras que asistieron a las jornadas.
La Comisión de Economías Regionales de Cooperar analizó durante las dos jornadas llevadas adelante el 6 y el 7 de abril la necesidad de desarrollar junto con el Estado Nacional políticas que impulsen al cooperativismo como modelo de organización para los productores pequeños que forman parte del universo de la agricultura familiar.
“Durante los últimos diez años se han constituido cerca de mil cooperativas agropecuarias, muchas de ellas con el objetivo de dar respuesta a los productores más pequeños y desprotegidos. Sin embargo, gran parte de las mismas no han logrado consolidarse. Hay que pensar nuevos modelos que permitan dar cuenta del doble carácter del agricultor familiar, que es tanto productor como trabajador”, especificaron las 15 organizaciones integrantes de esa comisión entre sus conclusiones.
El coordinador de este espacio de la Confederación Cooperativa de la República Argentina, Jorge Gandolfo, señaló que estas políticas deben permitir “una simplificación de la carga administrativa e impositiva en los momentos iniciales, las exigencias sanitarias y bromatológicas que permitan la puesta a punto de un producto listo para la góndola” y la “consolidación de procesos de integración cooperativa, imprescindibles para lograr sustentabilidad y real impacto en las condiciones del productor en situación de exclusión”.
En esta dirección, se acordó trabajar en la redacción de un capítulo específico en la Ley de Economía Solidaria promovida por el presidente del Inaes, Patricio Griffin, y que está siendo debatida en foros convocados por el IPES, referido a la profundización del cooperativismo en la agricultura familiar.
De este modo, el objetivo es completar la reparación histórica promovida por la flamante Ley de Agricultura Familiar, brindándole nuevos y más adecuados instrumentos para la cooperativización de este sector postergado.
El presidente del IPES y tesorero de Cooperar participó del cierre de la actividad y les dijo a los representantes de las economías regionales: “Piensen cómo debería ser el sector dentro de diez años, cómo les gustaría que sea. A partir de ahí planteen todas las cuestiones que consideren necesario para que el desarrollo que ustedes desean, sea posible y no encuentre trabas en lo legislativo”.